El señor de
la entrada nos ofreció dos menús y ambos los abrimos cuando éste se retiró.
-¿Ves algo
que te guste? – Preguntó Zayn.
-Me quedaré
con la lasaña. – Le confirmé.
-¿Estás
segura?
-Sí.
-Bien.
Zayn llamó
al camarero que sacó su cuadernillo cuando se acercó a nosotros.
-¿Qué quieren de beber? – Me preguntó mi
acompañante.
-Agua.
Zayn me miró
y mostró su sonrisa.
-Traiga una
botella de vino, el mejor que tengan, por favor. – Pidió Zayn
Le miré
sorprendida. Yo quería un vaso de agua.
-¿Qué me
miras?
-Quería un
vaso de agua, Zayn.
Sonrió y
miró a su entorno. El sitio era muy amplio y nuestra mesa estaba algo
escondida, como Zayn dijo, quería intimidad.
Los siguientes minutos los pasamos en silencio. Él mirando su móvil y yo mirando el entorno.
-Por cierto,
¿No decías que no querías que te viesen en sitios públicos? – Inicié una
conversación.
-En estos
restaurantes podemos estar seguros. Has visto que solo hay gente con dinero y
que no nos molestarán.
Le miré viendo
como el camarero nos ponía nuestros respectivos platos de comida.
Un gran olor
nos invadió.
Zayn cogió
sus cubiertos y comenzó a partir esa carne tan cara que se había pedido. Yo le
miraba sorprendida.
No podía
negar que ese chico era guapo, y ahora que estaba más arreglado, aún lo era
más.
-¿No comes?
– Me preguntó con un cacho de carne en la boca, y con una sonrisa radiante.
-Sí, estoy
esperando a que se enfríe. – Contesté.
-Date prisa,
después te quiero llevar a un sitio.
-No, Zayn.
El trato solo era ir a cenar. Después me iré a casa.
-¿Enserio
rechazas mi petición? – Dijo cortando otro trozo de carne.
-Sí. –
Afirmé soplando el primer cacho de lasaña que había partido.
~
El camarero
le trajo de vuelta la tarjeta de crédito a Zayn y él se levantó guardándosela
en su cartera. Parecía estar sereno. Se había bebido bastante vino él solo y yo ni siquiera lo probé.
Se dirigió a
mí y cogió mi chaqueta del respaldo.
-¿Qué haces?
– Pregunté expectante
-¿No puedo
ser un caballero? – Preguntó sonriente.
-Tu
personalidad no lo permite. – Dije sonriendo sarcásticamente.
El sonrió
mostrando sus dientes.
Colocó mi
chaqueta en mi cuerpo y extendió de nuevo su mano.
-No te
pienso dar la mano, eso lo hacen los novios.
-¿No quieres
ser…
-No. – Le
interrumpí.
Él sonrió de
nuevo a mi dureza.
Se acercó
retirando el pelo de mi oído y puso su boca en ella. Sentía su respiración y su
aliento hacía que mi respiración se volviese loca.
Mi pecho
cambiaba de tamaño apresurado por mi respiración.
-Eso solo
será de momento. – Susurró besándome en ese sitio justo.
Aprovechó mi
inmovilidad y agarró mi mano entrelazándola con la suya.
Me dejé
llevar por su mano, estaba en un estado de incredulidad que no podía
defenderme. Ese chico era demasiado ingenioso para que yo pudiese controlar con
él mis duras dotes femeninas.
Salimos de
ese restaurante agradeciendo el sitio a ese hombre que mostró tanto énfasis al
ver a mi acompañante.
De repente,
Zayn soltó bruscamente mi mano y se alejó algo de mí.
-¿Qué pasa?
– Pregunté sobresaltada a su brusco movimiento.
-¡Oh, Dios!
¡Es Zayn Malik! – Un grupo de chicas vinieron corriendo tras él.
-Eres mi
prima. – Susurró entre dientes.
Aún no capté
lo que me había pedido.
-Zayn,
¿Puedes hacerte una foto con nosotras?
Él sonrió y
aceptó poniéndose en medio de ese grupo de chicas. Después, les firmó un papel
que todas tenían en sus manos. Todas cuchicheaban mirándome. Yo estaba
ruborizada.
-¿Quién es
ella, Zayn? – Preguntó atrevidamente una chica.
-Ella es mi
prima.- Afirmó el chico sonriente, como siempre, terminando de firmar todos los
autógrafos. – Ha venido a pasar unos días aquí y he aprovechado para
enseñársela.
Las chicas
sonrieron nerviosas y aliviadas. Parecieron creerse la mentira que acababa de soltar Zayn.
-Muchas
gracias, de verdad. – Se agradeció la más alta del grupo.
Y
entusiasmadas, dando saltos y sonriendo, se alejaron de nosotros.
Zayn esperó
lo suficiente como para suspirar fuertemente aliviado.
-Por los
pelos.
-¿Por qué
les dijiste que soy tu prima? – Pregunté confusa.
-Si les digo
que eres mi “amiga” – hizo comillas con los dedos. – No se lo creerían jamás, inventarían
y todos pensarían que eres mi novia.
Fruncí el ceño por un instante, pero luego
acepté la idea de Zayn.
Los dos
montamos en su Mercedes negro.
-Llévame a
casa, Zayn, por favor.
-Ni hablar,
tú te vienes conmigo.
Pensé y, por
una vez, fui yo la que saqué el ingenio.
-Tengo…
tengo que coger otra chaqueta. Esta es demasiado fina.
-¿Enserio? –
Dijo él arrancando el coche. – Te dejo la mía.
-No, Zayn. También tengo que coger el móvil, se me ha olvidado.
-¿De verdad? - Preguntó desafiante.
-No, Zayn. También tengo que coger el móvil, se me ha olvidado.
-¿De verdad? - Preguntó desafiante.
-De verdad.
– Aseguré yo.
-Está bien,
confío en ti.
El coche nos
llevó hasta el portal de mi casa, esta vez, sin ningún percance en la
carretera. Aparcó en un sitio cerca de mi casa y Zayn bajó conmigo.
-¿Dónde vas?
– Pregunté.
-Subiré
contigo.
El chico me miró, asomando su cabeza por encima de su coche y empezó a rodearlo.
-No. – Le negué. –Espera aquí abajo. Además, ¿no confiabas en mí? – Sonreí sarcástica
El chico me miró, asomando su cabeza por encima de su coche y empezó a rodearlo.
-No. – Le negué. –Espera aquí abajo. Además, ¿no confiabas en mí? – Sonreí sarcástica
-Te esperaré
en el portal.
-Corres el
peligro de que alguien te vea entrando en mi portal, conmigo.
-Entra tu
primero y luego entraré yo.
Resoplé y
acepté que él se quedase ahí. Ya se cansaría de esperarme.
Subí las
escaleras y sujeté la puerta hasta que él, después de mirar por todos los lados
de la calle en busca de alguien, la sujetase y entrase detrás de mí.
Una vez
dentro, pulsé el botón del ascensor. Esperé a que bajase de espaldas a Zayn,
que permanecía sonriente apoyado en la pared.
Monté en el
ascensor pulsando el botón de mi piso y mirándome en el espejo que estaba en el
lado izquierdo de esté. A dos milímetros de cerrarse la puerta, un cuerpo lo
interpuso y se metió dentro.
(HAY CAPÍTULO 13)
Bien!! Me encanto, dos capítulos seguidos!! Soy feliz jejeje
ResponderEliminarMuy guay, besos <3
oh dios oh dioss!! yo qiero entrelazar mi mano tambn con uno d estos niños ¬¬ hay q soñar fuerte no?? pues alla vamos!! buen capi nere! :)
ResponderEliminar